En la dinámica de la dominación de espectro completo de la nueva doctrina militar estadounidense, cuyo propósito es lesionar los cimientos mismos del Estado democrático, derrocar al Gobierno Bolivariano por la vía violenta es el próximo paso
El Ejecutivo Nacional, el presidente Nicolás Maduro y las fuerzas que acompañan el proceso de liberación nacional denominado Revolución Bolivariana han alertado al mundo de que se acelera el desarrollo de un golpe de Estado no convencional orquestado por la derecha nacional e internacional, con respaldo del Departamento de Estado de EEUU.
Desde el inicio de la Revolución Bolivariana, con el comandante Hugo Chávez a la cabeza, Venezuela se convirtió en objetivo para los intereses de Washignton. A la Casa Blanca jamás le convendrá, para consolidar su hegemonía, lidiar con gobiernos que defiendan su soberanía económica y política, y más si se trata de la nación que cuenta con las mayores reservas de petróleo del mundo.
El país, en estos 17 años, estuvo sometido a un constante asedio en todos los aspectos: económico, social, psicológico, mediático, a fin de crear las condiciones para que se produzca el fin de la experiencia revolucionaria con el cese del Gobierno Bolivariano. Lo intentaron con el comandante Chávez en 2002, y tras su desaparición física y la elección de Nicolás Maduro en 2013.
Estos formatos se aplicaron cuidadosamente en Siria, para generar la actual guerra intestina que asola a la nación árabe. La actitud de la oposición y de algunos analistas de la derecha criolla, al subestimar la denuncia del golpe de Estado en marcha, no hace más que corroborar que intencionalmente participan en esta aventura desestabilizadora contra la democracia venezolana, y pretenden llevarla a una nueva etapa: la confrontación decisiva entre las fuerzas leales al Gobierno Bolivariano y la contrarrevolución y el fascismo mercenario.
Como bien lo ha indicado tanto el presidente Maduro como el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, no se trata de un “golpe clásico” sino de un golpe no convencional, inscrito dentro del concepto de la dominación de espectro completo, de la nueva doctrina militar establecida por el Estado Mayor Conjunto de EEUU desde finales de la década de los 90.
CHÁVEZ LO ADVIRTIÓ
Ya en el año 2007, durante el acto de graduación del I Curso de Comando y Estado Mayor Conjunto, el comandante Hugo Chávez señaló a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) la necesidad de profundizar en el estudio de la tesis de la dominación de espectro completo, utilizada por el imperialismo en los actuales conflictos para preservar su hegemonía sobre áreas y recursos geoestratégicos.
Indicaba entonces el comandante Chávez el asedio y la amenaza permanente sobre la Revolución Bolivariana, con el fin de derrocarla para privatizar la industria petrolera y echar por tierra la inversión social, al imponer un Gobierno títere que obedezca los intereses de las transaccionales y del capital monopólico.
La desaparición física del comandante Chávez condujo a la administración Obama a intensificar esta estrategia en Venezuela y en otros países hermanos de al región, para dar por concluido el ciclo de gobiernos progresistas y de izquierda en América Latina.
MARCHA CON INTENCIÓN GOLPISTA
Tras el fracaso de la Hoja de Ruta 2016, su doble juego con la supuesta convocatoria al referéndum revocatorio al intentar un megafraude para invalidar la solicitud y el constante entorpecimiento del diálogo que avala la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y la comunidad internacional, la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) apuesta por repetir el esquema del 2002 y del 2014, con simultaneidad de acciones para presionar al Gobierno Bolivariano con el objetivo de poner fin a destiempo al mandato del presidente Nicolás Maduro. Es decir, la oposición se decanta por la vía no democrática y en ese contexto se inscribe la convocatoria de la marcha de este 1 de septiembre, que busca generar violencia y enfrentamiento entre los sectores, con la participación de mercenarios, grupos paramilitares y bandas criminales, a fin de abonar el terreno para una intervención extranjera.
A propósito, el sociólogo estadounidense señaló en una reciente entrevista radial, al ser consultado sobre al actitud del secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, en su permanente ataque contra el Estado y el Gobierno venezolano:
“Se están preparando para un golpe. El 1 de septiembre hay una marcha supuestamente contra el Gobierno organizada por la oposición, pero hemos recibido noticias de que los EEUU, la CIA, junto con grupos armados en Venezuela, van a provocar unos incidentes, ataques violentos y utilizar a la OEA, con el jefe Almagro, para pedir intervención. Van a decir que hay una crisis humanitaria para intervenir”, indicó Petras.
“La posibilidad de que la OEA se preste a una invasión encabezada por los EEUU, con la participación de otros peones latinoamericanos, es muy probable. Ahora, uno no sabe si la marcha del 1 de septiembre tendrá una gran asistencia, si sienten que tienen algún respaldo en algunos sectores militares, si tienen la posibilidad de intervenir con las fuerzas externas, es muy probable. Estamos al punto de la crisis”, alertó.
“Y esta nueva marcha es muy peligrosa porque atrás de eso están los provocadores institucionales, representantes del Congreso opositores, representantes de los EEUU. Y la prensa aquí ha llamado abiertamente por un golpe, dicen que no pueden esperar por nuevas elecciones. Dicen que la situación exige, por el hambre, por la violencia, por la delincuencia, todo lo que pueden acusar el Gobierno. Es una situación que me parece algo como en agosto o setiembre del 73 en Chile”, explicó el analista y profesor universitario.
“…en la propaganda, en los documentos ficticios legales está dando un rápido ataque para invadir Venezuela. Lo que le falta a Almagro hasta ahora es la señal interna, y eso se va a combinar con la violencia de los grupos de choque, de los matones. Y Almagro con los matones puede pedir la intervención de la OEA”, resaltó Petras.
Ante esta amenaza orquestada desde EEUU, con apoyo de sus aliados internacionales y nacionales, la dirigencia revolucionaria ha llamado al pueblo desde distintas instancias a no caer en provocaciones, a mantener la calma, a movilizarse, a no desmoralizarse;, a activar la inteligencia social junto con el reforzamiento de la unidad cívico-militar para defender la democracia. Mantener la paz es el objetivo de todos los patriotas en este momento.
T/ Modaira Rubio
I/ Asian
F/Archivo CO
_______________________________________________________________________________________________________________
Los pueblos del mundo con la paz
En vísperas de la convocatoria a la marcha desestabilizadora del 1 de septiembre, los movimientos progresistas y de izquierda de todos los continentes, a través del Comité de Solidaridad Internacional y Lucha por la Paz (COSI), integrante del Comité Ejecutivo del Consejo Mundial de la Paz (World Peace Council-WPC) con sede en Atenas, Grecia, han iniciado una campaña de solidaridad con la Venezuela Bolivariana desde el 29 de agosto al 4 de septiembre, con amplia participación de personalidades internacionales, organizaciones no gubernamentales, gobiernos y partidos políticos del mundo, manifestando su contundente apoyo, firme y pleno respaldo al pueblo venezolano, al Gobierno del presidente Nicolás Maduro Moros y al proceso revolucionario bolivariano ante la nueva escalada injerencista por parte de un sector de la oposición fascista lacaya del imperialismo norteamericano, que se prepara para desencadenar acciones de terrorismo encubiertas tras el llamado a una toma “pacífica” de Caracas este jueves 1 de septiembre.
Recibimos desde Berna el comunicado del movimiento ALBA Suiza, el cual reproducimos parcialmente como un documento histórico que da cuenta del repudio de los pueblos al plan golpista norteamericano:
“Comunicado de solidaridad urgente con el pueblo venezolano: acción mundial de solidaridad con Venezuela, 29 de agosto al 4 de septiembre”.
“Desde ALBA Suiza manifestamos nuestro contundente apoyo, nuestra firme solidaridad y pleno respaldo al pueblo venezolano y al Gobierno del presidente Nicolás Maduro Moros.
El Gobierno Bolivariano y las organizaciones políticas, sociales y de derechos humanos del país vienen denunciando una guerra de carácter político, económico, mediático y psicológico como parte de un continuo intento de desestabilización política y social hacia un golpe de Estado definitivo contra la democracia participativa y los grandes logros sociales realizados para beneficio de todo el pueblo por la revolución bolivariana. El objetivo de estos sectores de la derecha y ultraderecha es controlar el Gobierno y ponerlo al servicio de los intereses de EEUU y las companías extranjeras que desean los inmensos recursos naturales de Venezuela.
Denunciamos la nueva escalada desestabilizadora por parte de un sector de la oposición fascista, lacaya del imperialismo norteamericano que se prepara a desencadenar acciones de terrorismo encubiertas tras el llamado a una toma supuestamente ‘pacífica’ de Caracas este jueves 1 de septiembre. Las recientes llamadas públicas a ‘la toma de Carácas’ de varios dirigentes de la derecha y ultraderecha están repletas de insultos y amenazas a las más altas instancias públicas, así como a las Fuerzas Armadas, creando un clima de tensión proclive a la violencia. Recientemente ya se detuvo a individuos armados para atentar durante las protestas. Similares acciones desestabilizadoras fueron empleadas en diversas ocasiones, como en febrero a junio de 2014, que dejaron un saldo de 43 personas fallecidas y unos 890 heridos, además de cuantiosos daños materiales. En ellas participaron junto a activistas y políticos de la derecha y ultraderecha venezolana, delincuentes comunes, sicarios, narcotraficantes y paramilitares. El Gobierno demostró que tras las movilizaciones supuestamente ‘pacíficas’ había un plan golpista basado en acciones criminales y terroristas con apoyo y asesoramiento extranjero.
Por lo que desde ALBA Suiza alertamos a la atención pública mundial sobre posibles acciones desestabilizadoras violentas, contra el Gobierno Bolivariano de Nicolás Maduro y el pueblo venezolano sumándonos a la campaña mundial de solidaridad con la revolución bolivariana. Llamamos a los sectores golpistas a respetar la democracia y el gobierno electo. Reclamamos a EEUU que retire la ‘Orden Ejecutiva’ de amenaza contra Venezuela y la paz del continente”.
Sé el primero en comentar en «Venezuela está en la mira de EEUU»